martes, 20 de octubre de 2009

Ahora al Pleno


Mientras escribo este post, la mayoría de medios de comunicación emiten la noticia: La Comisión Especial Revisora del Código Penal del Congreso ratificó su aprobación de despenalizar el aborto eugenésico y por violación. En realidad es sorprendente puesto que -por lo menos yo- estaba convencida de que Cipriani y Rey moverían sus influencias para no permitir la aprobación de este proyecto. Ahora pasará al Pleno del Parlamento y es probable que ahí sí se tenga inconvenientes para su aprobación.
Después de todos los debates que en los últimos días he escuchado y leído, caben algunas pregunta -sobre todo para los que están en contra de despenalizarlo-: ¿Saben qué es lo que una mujer siente después de haber abortado? ¿Se han puesto en el lugar de una mujer que ha tenido que pasar por el difícil proceso de que un "médico" le introduzca desconocidos aparatos? Peor aún, ¿Conocen cómo se siente una mujer que se vio obligada a practicarse un aborto sola, con media docena de pastillas que se toma y se intruduce?. Después de lo que he escuchado, me parece, que las respuestas a estas preguntas no son afirmativas.

He oído además argumentos como: "Es una cobarde porque no quiere asumir la responsabilidad de ser madre". ¿No es acaso un acto de valentía poner en peligro su salud y hasta su vida cuando se practica un aborto? Ya lo he dicho antes y lo ratifico ahora: No se trata de estar a favor del aborto, ni de "matar cruelmente a un ser inocente". Se trata de estar a favor de no castigar con indiferencia a esas mujeres que por la desesperación de haber sido abandonadas, o peor aún violadas, tienen que acceder a métodos clandestinos o dejar que cualquier pseudo profesional de la salud maltrate su cuerpo de la peor manera.

Considero que despenalizar el aborto, en ciertos casos, es un acto de humanidad más que de inhumanidad. Creo además que sí es necesario, lejos de fanatismos religiosos, realizar un debate profundo de profesionales que conozcan sobre el tema y que den muestras concretas de cómo podría funcionar una eventual despenalización del aborto. Esperemos que prospere.
Catia Gutiérrez Guerrero.

2 comentarios:

Minos dijo...

Para mí, hace rato que esos casos extremos deberían ser despenalizados, no sé por qué se complican tanto la vida.
Yo iría más alla: despenalizar el aborto por completo. Las condiciones en las que se practica muchas veces no son confiables, y por ser una actividad oculta, no se puede pedir ayuda cuando hace falta. Es un asunto de sentido común. Por supuesto, nadie quiere llegar a ese extremo, esta norma no facilitaría los abortos, sino que daría calidad de atención en caso sea necesario.

LuiFz! dijo...

Leo por las calles que el lema es:

SACA TUS ROSARIOS DE MIS OVARIOS...rezar no da de comer, no da escuela ni mucho menos dignidad hacia los niños con madres de 15 años!